fregadero de acero inoxidable
11
Mar

Cómo limpiar un fregadero de acero inoxidable

Así como las encimeras tienen un cuidado especial, el fregadero también. Tal vez se puede pensar que como está en contacto continuo con jabón no necesita una limpieza particular, sin embargo, esta creencia está muy lejos de lo indicado, el fregadero requiere de una higiene específica.
Aunque el fregadero siempre esté en contacto con agua y jabón, de igual manera allí se acumulan una serie de bacterias, ya que también está en contacto con comida, tanto cocida como cruda. ¿Cuantas veces se dejó descongelando alguna carne dentro del fregadero o incluso vegetales o frutas para ser lavadas?. Este contacto frecuente es la razón por la que hay que desinfectarlo regularmente para evitar infecciones.

La falta de limpieza puede provocar desde la aparición de hongos hasta bacterias que causan infecciones graves. Todo esto deja en evidencia la importancia de desinfectar el fregadero, pero, ¿Cómo hacerlo sin dañar su aspecto? ¿Basta con agua y jabón?
A continuación te mostraremos un par de formas de limpiar el fregadero de acero inoxidable sin problemas.

Limpieza de un fregadero de acero inoxidable

1. Vinagre y bicarbonato de sodio
Estos dos productos son muy conocidos en la limpieza del fregadero, gracias a su efectividad.
– Lo primero que hay que hacer es rociar en el fregadero (después de haber dejado correr un poco de agua para que esté húmedo) bicarbonato de sodio. Esto absorberá la suciedad de la superficie.
– Dejar el producto unos 10 minutos.
– Rociar un poco de vinagre blanco y frotar la superficie con una esponja suave, nunca de metal porque la raya.
– Enjuagar el fregadero con una mezcla de una parte de vinagre con dos de agua.
– Una vez que la superficie esté limpia, se puede verter unas gotas de aceite de oliva y frotar el producto con un paño suave, tanto por el fregadero como por el grifo. Esto ayudará a reducir los rayones.
Si se desea sacarle brillo a la superficie, al final se puede agregar alcohol isopropílico y frotar por todo el lavaplatos. Esto, además de dar brillo, ayuda a la disminución de la grasa.

2. Detergente líquido, vinagre y bicarbonato de sodio
– Colocar en una esponja suave ½ cucharada de detergente líquido y frotar sobre el fregadero para quitar la suciedad y partículas de comida.
– Luego enjuagar la superficie con agua caliente del grifo.
– Verter entre ¼ y ½ taza de bicarbonato de sodio sobre el fregadero. La cantidad dependerá del tamaño de la superficie. Frotar el producto con una esponja suave o un paño limpio.
– Volver a enjuagar la superficie con agua caliente. Después secar con un paño limpio.
– Se pueden aplicar unas gotas de aceite de oliva o de bebé y frotar con una servilleta de papel, para darle brillo a la superficie.

Cualquiera sea la forma que elijas para limpiar el fregadero, será efectiva y lograrás mantener las bacterias al límite, así que no olvides hacerlo.

 

Foto: Callum Hill